1) Si puedes hacer la tarea, no dudes, ¡hazla!
Si una tarea crees que te va a llevar menos de 2 minutos hacerla (aproximadamente), no merece la pena perder tiempo en planificarla, es mejor hacerla y una cosa menos.
2) Anota cuanto tiempo te lleva realizar una actividad
Si estimas previamente cuanto tiempo puede llevarte la tarea, será mucho más sencillo que puedas planificarla para un hueco en el que puedas hacerla. Anotar tareas en nuestra agenda sin conocer el «tamaño» de las mismas nos llevará a situaciones de verdadera saturación.
3) Planifica pero ten en cuenta imprevistos
Si trabajamos una media de 40 horas a la semana, es bueno que hagamos al inicio de la semana una planificación donde nos marquemos los objetivos que nos gustaría alcanzar (y las tareas a llevar a cabo para ello) pero sin olvidar que, queramos o no, van a surgir imprevistos y tendremos que lidiar con ellos. No planifiques actividades para más de 5-6 horas en una jornada laboral de 8 horas.
4) No te dejes llevar por las tareas urgentes disfrazadas de importantes
Centra el foco en las tareas que te ayudan a lograr los objetivos que te has planteado. Trabajar de forma regular resolviendo imprevistos y urgencias como principal actividad te llevará a perder el rumbo en tu camino.
5) No pierdas tiempo en tareas sin valor
Si te paras a pensar en lo que hiciste en las últimas semanas, seguramente habrá tareas que si tuvieras que tomar la decisión ahora no las harías. Piensa en lo que aporta valor a tu día a día y céntrate en ello.
6) Visualiza pero sin perder de vista el camino
La perspectiva es clave para mantener un equilibrio saludable en la vida. Pensar donde queremos vernos en el futuro es una motivación para trabajar fuerte en ello. Lucha por tus metas, pero de igual modo aprende a celebrar los pequeños éxitos durante el camino.
7) Aprende a decir NO
Asumir como norma tareas o proyectos que no está alineados con tu responsabilidad y tus objetivos te va a generar una gran ansiedad y frustración. Pasar un mal rato hoy diciendo que NO compensa con respecto a los beneficios que aporta tener una mente tranquila mañana.
8) Guarda tiempo para ti y tu salud
Cuida tu cuerpo para que sea el complemento perfecto a tu mente. Dedica todos los días una media de 45 minutos para hacer algo de ejercicio. Evita la vida sedentaria. La mejor «máquina» que tienes entre manos no es tu móvil, ni tu portátil ni tu coche, es tu cuerpo. Cuídalo como si fuese para toda la vida 😉
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2 Comentarios. Dejar nuevo
No entiendo como en pleno siglo XXI, cuando hablamos del trabajo del conocimiento seguimos hablando de cosas urgentes e importantes. En una sociedad cambiante como la nuestra, dejarse llevar por lo urgente e importante, nos hace estar continuamente a expensas de circunstancias externas. Hay empezar a plantearse el cambio de modelo, no gestionamos urgencias e importancia, porque no podemos hacerlo, solo podemos gestionar a que dedicamos nuestra atencion.
Cruz, encantados de que leas nuestro contenido y compartas tus impresiones 🙂
Efectivamente, lo que no tiene sentido en una sociedad como la actual donde disponemos de gran cantidad de fuentes de información, de contextos, así como de áreas de responsabilidad, que hablemos de una gestión de tareas basada únicamente en la priorización en base a temas urgentes e importantes. Este tipo de planteamientos «clásicos» no pueden aplicarse en la actualidad -de la misma forma que se hacía en el pasado- puesto que hay que aprender a trabajar con entornos cambiantes, tomando decisiones continuamente.
Dicho esto, lo que se indica en la infografía se refiere a la relevancia que tiene para el cumplimiento de los objetivos que nos hemos marcado, que aprendamos a analizar y entender qué es lo que nos aporta valor y qué no.
En esta sociedad digital en la que vivimos, contamos cada día con más métricas que nos permiten saber qué merece la pena hacer y qué no compensa, qué nos da resultados y qué no, hasta incluso, qué nos provoca felicidad y qué no. Todo esto debe ayudarnos a eliminar comportamientos basados en la resolución de inputs qué simplemente son urgentes pero que ni nos hemos parado a pensar si merecen o no la pena.